domingo, 16 de mayo de 2010

XX MAÑANA VISITA

BABEL Y BABLE, o viceversa

     Yo siempre he tenido problemas con los idiomas, he estudiado seis, sin contar lenguajes de programación, y apenas si entiendo y hablo uno, mi sueño siempre fue el don de lenguas del Colegio Apostólico. Siempre maldije aquello de la Torre de Babel y que dios nos condenara confundiendonos el habla. Ahora sé que ni lo de la Torre ni lo de dios fue cierto, que la verdad es que por razones tribales, por sentirse de una tribu, a muchos hombres les gusta hablar diferente de los otros.
     Hoy leía que don José Montilla irá al Senado, que hablará en Catalán y que costará 6500 € traducir que él hable en una lengua que no había oído hasta los 20 años. ¿Cuántos carteles que decían "La Coruña" han tenido que ser cambiados para que digan "A Coruña"? ¿Cuánta biodiversidad se ha perdido al unificar todas las variedades de las lenguas gallegas al gallego oficial? Alguien proponía en televisión hace unos días que el dni de asturianos debía ser cambiado para poner los lugares de nacimiento y domicilio no sé si en bable, fala o asturianu. Los letreros de las carreteras se están cambiando para decir en bable y español , lo que antes decía en castellano, que las más de las veces se diferencian en una letra.
     A mi me gustó cuando conocí alemanes e italianos que hablaban su dialecto cuando hablaban con su madre, con su novia o con los de su pueblo, pero el resto de la vida lo hacían en la lengua general.
     Sería estupendo que todo el mundo tuviese las lenguas que quisiese para hablarlas con los suyos, pero que luego y para todo lo demás todos hablásemos una lengua común y lo más general posible, aunque fuese inglés. Aunque lo bonito es que se hubiese conservado el latín como Lengua Universal.
     A mi me gusta oir cuando la gente de por aquí habla a su manera, suena todavía mejor que cuando hablan castellano, y además casi se entiende, o te lo traducen si te ven las cara rara.

HABLANDO de LIBROS

     He pillado un libro de Javier Reverte, ‘El río de la luz. Un viaje por Alaska y Canadá'. Fantástico, siempre estoy deseando seguir leyendo. Leer un libro de viajes bueno es una forma estupenda de viajar. Si está bien escrito parece que estás viajando tú, y para colmo son viajes alucinantes que uno ya no podrá hacer nunca. En este libro recorre la historia y los parajes donde transcurrió una de las fiebres de oro, la que llevo al cine Chaplin en la Quimera del oro. Si os gusta viajar y leer, buscadlo.

MAÑANA (17.05.12) VÍSITA.
     Me parece que lo conté el otro día, el caso es que viene una semana de viaje y compañia y esta bitácora se quedará un poco sola.

PD
     Ni el tiempo ni los temas dan para fotos.

1 comentario:

  1. Querido Manolo,

    Diversas ocupaciones me han desviado del camino recto durante los últimos meses. Acabo de consultar tu bitácora por primera vez después de mucho tiempo. Me alegra ver que has sido disciplinado y no has dejado de contarnos tus andanzas. Tienes un nuevo seguidor (yo).

    Tu eterno alumno

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